Al elegir los materiales adecuados para la estructura del edificio, se deben considerar diferentes factores, que incluyen:
Fuerza y resistencia: Los materiales más fuertes y resistentes funcionan mejor y más estables en la estructura del edificio. Por ejemplo, el acero y el hormigón se utilizan en edificios altos con cargas elevadas debido a su gran resistencia.
Procesabilidad: Los materiales que son fáciles de procesar y dar forma, se desempeñan mejor en el diseño y construcción de estructuras diversas y complejas. Por ejemplo, el acero se usa en edificios altos y complejos debido a su flexibilidad y procesamiento simple.
Flexibilidad: Los materiales que tienen una alta flexibilidad son más resistentes a los terremotos y cargas que pueden provocar la deformación de la edificación. Por ejemplo, el acero se usa en edificios sísmicos debido a su alta flexibilidad y resistencia a los terremotos.
Aislamiento térmico y acústico: Los materiales que tienen altas capacidades de aislamiento térmico y acústico se utilizan en edificios que deben estar protegidos contra el sonido y la temperatura. Por ejemplo, el vidrio de doble acristalamiento y el polietileno blanco se utilizan como aislamiento térmico y acústico en los edificios.
Costo: El costo de los materiales en el diseño de la estructura del edificio juega un papel importante en su selección. Por ejemplo, el uso de materiales costosos como el acero puede ser raro en edificios con presupuestos limitados.
Uso del edificio: El tipo de uso del edificio también debe tenerse en cuenta en la selección de materiales. Por ejemplo, en edificios residenciales, se utilizan con mayor frecuencia materiales con altas capacidades de aislamiento térmico y acústico, así como capacidades de procesamiento y modelado simples.
Efectos nocivos sobre el medio ambiente: Los efectos nocivos del uso de cualquier material sobre el medio ambiente deben ser considerados en su selección. Por ejemplo, se debe considerar la selección de materiales con el menor efecto nocivo para la producción de gases de efecto invernadero durante la vida útil del edificio.
En general, en la selección de materiales para la estructura del edificio, se debe prestar atención a varios factores, incluyendo la resistencia, la procesabilidad, la flexibilidad, el aislamiento térmico y acústico, el costo, el uso del edificio y los efectos nocivos para el medio ambiente. En cada plan de construcción, el tipo y cantidad de uso de cada uno de estos materiales puede ser diferente
